En la entrada anterior (Regalos de Navidad: Juguetes para bebés parte I) os recomendábamos juguetes para bebés de hasta 12 meses, en este caso el bebé todavía no pide, se entusiasma simplemente con el regalo y el envoltorio, por eso somos nosotros los que debemos elegir el juguete pensando en sus posibilidades. Pero a partir del año quizá habría que tener en cuenta otros criterios a la hora de comprar los regalos para bebés. A partir del año o los dos años, también es importante que intervenga él en la elección, o por lo menos debemos conocer sus gustos y aficiones para dar con el regalo perfecto.
Entre los 12 y los 24 meses los niños comienzan a andar y por lo tanto llegan más lejos, son capaces de desplazarse y esto les hace sentirse más independientes. En esta etapa los juguetes deben ser más sencillos, más simbólicos, para que se estimule su imaginación, por ejemplo muñecos de trapos que potencien su capacidad simbólica, que sirvan para inventarse juegos, una vez será el malvado «caratrapo» y la siguiente el héroe «turulato». En esta etapa además los niños están en constante movimiento, rastrean toda la casa y también su entorno, ponen a prueba sus nuevas habilidades, saltan, corren, suben escaleras, lo ideal ahora son triciclos o bicicletas sin pedales, balones, túneles plegables por los que meterse, tiendas de campaña para esconderse, o toboganes. A partir del año ellos serán capaces de resolver problemas sencillos y memorizar series simples, también pueden manipular los objetos pequeños con mayor destreza, y ya acercándose a los dos años el juego que más les gusta es el juego simbólico, imitan todo lo que ven. Nos imitan hablando por teléfono, dibujando o leyendo. También empiezan a adquirir los conceptos espaciales, la forma, el volumen, el peso, conceptos como corto o largo, grande o pequeño, alto o bajo.
Teniendo en cuenta las nuevas habilidades y destrezas de esta etapa, los juguetes más adecuados para esta edad, además de los mencionados anteriormente, son: libros que necesiten interacción, pinturas de dedo, ceras gordas, pizarras, animales de granja o zoológico, instrumentos musicales, juegos de construcción, rompecabezas con pocas piezas, plastilina y herramientas para moldear.
De 2 a 3 años empiezan a ser conscientes de que son una persona distinta de su mamá, se refuerza su independencia y por supuesto el juego simbólico se hace más patente. comienzan a referirse a ellos mismo por su nombre, entienden más palabras de las que dicen y quieren hacerse entender, quieren comunicarse y necesitan juguetes que les ayuden a comprender el lenguaje. Sus capacidades motrices también están afianzadas, ahora disfrutan con el movimiento de las cosas, desean arrastrar y empujar objetos. la música, las canciones, los cuentos y dibujar serán la mejor manera de relacionarse con nosotros y con el mundo, serán su forma de expresarse. En esta etapa los mejores juguetes son encajables, construcciones, cuentos, juguetes que les permitan representar situaciones cotidianas como un muñeco de un doctor, las cocinitas, sillas o carros para pasear a muñecos, títeres. Y ahora es muy importante que ya empiecen a jugar con la arena, cubos, palas, rastrillo, hagan barro… esto les ayudará mucho al control de esfínteres.
Aunque también hay juguetes u objetos que les van a interesar siempre, sólo hay que descubrir lo que le gusta a cada uno, mis hijos por ejemplo lo tienen claro desde muy pequeñitos.
Deja un comentario